lunes, 13 de abril de 2009

VOCABULARIO RENACIMIENTO Y BARROCO

RENACIMIENTO:

 

ALMOHADILLADO: tipo de sillería construida a base de sillares labrados de forma que las juntas queden rehundidas. Podemos encontrar de distintos tipos: corridos, en chaflán, ligado, en punta de diamante, etc. Es un acabado muy característico de los palacios italianos del Renacimiento sobre todo en la planta baja. Alguno de los más singulares el Palacio Pitti, con sus tres pisos aparejados en este sistema o el palacio Medici – Ricardi, con un alto almohadillado en su primer piso.

 

GRUTESCO: decoración escultórica o pictórica a base de seres fantásticos humanos, vegetales y animales, completamente entrelazados formando un todo, propia del Renacimiento. Procede de la decoración romana pompeyana descubierta en las excavaciones realizadas a finales del S. XV. Este motivo ornamental es muy característico del Plateresco español. Un buen ejemplo lo podemos encontrar en la fachada de la Universidad de Salamanca.

 

HERRERIANO: estilo creado por Juan de Herrera (1530 – 1597), austero y monumental, que caracteriza el reinado de Felipe II y cuyo arquetipo es el monasterio de El Escorial. Actualmente, el monasterio de El Escorial está considerado como prototipo del Manierismo. Dice textualmente Hauser “la severidad y simplicidad de las formas no es más que un juego exhibicionista…” la construcción es verdad, está completamente orientada hacia el interior, pero su “introversión” se manifiesta de una manera ostentosamente exhibicionista. El edificio encierra en sí la sede del monarca más poderoso de su época”. (El Manierismo, pág. 306. Ed. Guadarrama 1965). El estilo estuvo vigente aunque ligeramente transformado por las corrientes barrocas hasta la primera parte del S. XVII. La desnudez ornamental, será el culmen de depurar la decoración plateresca. Se caracteriza por su rigor geométrico, la relación matemática de los elementos arquitectónicos, destacada horizontalidad, cubiertas de pizarra y chapiteles piramidales y chapiteles piramidales. Uno de los pocos elementos ornamentales las bolas escurialenses, grandes esferas de granito sobre formas piramidales.

 

MANIERISMO: Actualmente después de numerosos estudios se entiende por tal el arte –arquitectura, escultura, pintura, literatura…- que existió en Europa desde aproximadamente 1520 (muerte de Rafael) hasta 1620 (muerte del Greco).

El lenguaje manierista sustituye el lenguaje clasicista del Renacimiento por otro muy distinto de carácter desgarrado y contradictorio, propio de una época de crisis, en el que es patente la tensión, la distorsión, la sofisticación, la confusión, la arbitrariedad, la inverosimilitud, la heterodoxia, la fuerza expresiva, la experimentación…

Su origen etimológico proviene de la definición que ciertos escritores del S.XVI, como G. Vasari, asignaban a aquellos artistas que pintaban “a la maniera de…”

El manierismo se preocupaba por solucionar problemas artísticos intricados, como desnudos retratados en posturas complicadas. Las figuras en las obras manieristas tienen frecuentemente extremidades graciosas pero raramente alargadas, cabezas pequeñas y semblante estilizado, mientras sus posturas parecen artificiales y difíciles.

Ejemplos: Palladio en la Villa Rotonda mezcla elementos de arquitectura civil y religiosa, o Juan de Herrera prescindiendo de toda ornamentación en El Escorial.

Miguel Ángel pinta “El Juicio Final” es muy manierista al concebir una composición inquietante, confusa y turbulenta, con grupos fragmentados e aislados, como lanzados a un espacio irreal y discontinuo, lejos de la quietud y reposo de una composición clásica.

 

 

PLATERESCO: nombre con el que se designa al primer Renacimiento arquitectónico español que abarca los reinados de Carlos V y Felipe II (S. XV), el nombre se debe a Ortiz de Zúñiga (S. XVIII) por el parecido que existe entre el tratamiento de la piedra y el que dan los orfebres a los metales preciosos, sobre todo en las labores de crestería.

Pueden seguir estructuras góticas con influencias italianas, unidas a elementos mudéjares típicos del mundo hispano.  Se caracterizará por un aumento de la riqueza decorativa con respecto a las realizaciones italianas, sobre todo en las portadas que se convierten en verdaderos retablos en piedra, ascendiendo hasta los aleros e incluso sobrepasándolos. Abundan los temas heráldicos, grutescos y hornacinas con esculturas, aunque también utilicen elementos como el muro de sillar almohadillado más cercano a la sensibilidad italiana.

La columna será abalaustrada o con formas bulbosas, lejos de la rigidez y sencillez italiana y en muchos casos recubierta de grutescos.

Un buen ejemplo la fachada de la Universidad de Salamanca 1534.

 

SFUMATO: Técnica utilizada en la pintura óleo por primera vez por Leonardo Da Vinci que consiste en dar a los objetos contornos vagos, difuminados, borrosos, con los que se consiguen efectos atmosféricos. Todo ello proporciona a la composición un aspecto de vaguedad y lejanía. Se utiliza para dar una impresión de profundidad en los cuadros del Pleno Renacimiento. Ejemplo más significativo “La Gioconda” Leonardo Da Vinci. Técnicamente presenta cierta complejidad, donde a través de distintos pasos se consigue que en la pintura no aparezcan los trazos del pincel sino la superficie lisa y desdibujada de los contornos.

 

TONDO: Composición pictórica que se realiza en formato redondo o en forma de disco y no rectángulo que es la manera más tradicional. Tiene su origen en la Antigüedad sobre todo en las escenas de las cerámicas griegas, como son los Kilis (copas) . En el Renacimiento tendrán gran apogeo sobre todo en algunos pintores incorporándolo como imago clipeata romana (retrato rodeado de laurel), sobre todo en piezas de cerámica y mayólica. Un buen ejemplo de estas cerámicas, Andrea della Robia, decoración del Hospital de los Inocentes en Florencia.

Puede ser también un elemento arquitectónico como ventana redonda u ojo de buey.

En pintura lo puno de moda el pintor Botticelli, en el S. XV que pintó varias Madonas en este formato, como la Virgen del Magnificat.

 

- BARROCO

 

BALDAQUINO: Se denomina así al dosel – o ciborio – que cubre el tono , altar tumba, estatua… Puede estar hecho de distintos materiales: tejidos, madera pintada, o templete con columnas arquitectónicas, plata o como el más conocido bronce San Pedro del Vaticano en Roma (Bernini S. XVII).

Este último se concibe como si de una arquitectura efímera se tratase, imitando no solo la tela sino el movimiento de la misma en las bambalinas que cuelgan de las cornisas. La estructura se coronará con cuatro grandes ménsulas que permiten ver a través de su interior. Por otra parte la utilización de las columnas salomónicas, formas curvas y fuertes claroscuros le convierten en el paradigma de la arquitectura barroca.

 

CARNACIÓN: dícese del tratamiento pictórico de las carnes en las representaciones de la figura humana, principalmente en las escultóricas. Es una técnica propia del barroco sobre todo español, debido a la utilización de la talla como forma principal de expresión. La madera tallada, se completaba con la utilización de efectos más teatrales, a través de las distintas formas de carnación, sobre todo en las esculturas piadosas y religiosas. Es importante en ambas escuelas la Castellana Gregorio Fernández (Cristo Yacente) o Andaluza Martínez Montañés (Cristo de la Clemencia).

 

 

CHURRIGUERESCO: Termino relativo al Barroco español, que hace referencia en su origen a la obra de José de Churriguera (1665-1723). Se presenta como un estilo excesivamente decorativo, donde los estípites, las columnas salomónicas, frontones partidos, ventanas lobuladas… son el leit motiv, de sus portadas y decoraciones interiores. Va a tener gran influencia en el barroco hispanoamericano, teniendo los mejores ejemplos en Andalucía: Palacio de San Telmo Sevilla, o Madrid Hospicio de la capital.

 

ESTOFADO: Técnica de la imaginería para policromar las ropas, semejante al esgrafiado, pero sobre el pan de oro. Se comienza a utilizar en el alto Renacimiento, teniendo gran importancia en la escultura barroca, por su sentido teatral y naturalista.

La técnica consiste en cubrir con pan de oro la zona del vestido o tela que se va a decorar. Sobre el pan de oro se da el color, una vez seco se raya con buril finamente para hacer los dibujos que simulen los bordados y brocados de la tela que se intenta representar. Un buen ejemplo “El entierro de Cristo” de Juan de Juni.

  

SERPENTINATA: En forma de serpiente, con movimiento giratorio y contorsionado, artificioso, tiene gran importancia en la escultura del manierismo y en algunos momentos de la pintura del trecentto italiano, por ejemplo en las formas de los mantos de las Madonas de la escuela de Siena, donde el dorado cae en forma de serpentinata, creando una especie de cinta o serpentina, alargando las formas corpóreas. Un buen ejemplo de escultura en serpentinata es El rapto de las sabinas de Juan de Bolonia, típico del Manierismo florentino.

 

TENEBRISMO: Estilo de pintura característico del Barroco introducido por Caravaggio, caracterizado por fuertes contrastes de luz y sombras, luz que va disolviendo los contornos, los detalles hasta hacer desaparecer los objetos en la oscuridad de la sombra, todo ello en un intento de crear un espacio cada vez más real y de manera más natural. La realidad es que crean una luz focalizada, dejando como islotes de formas que se pierden en la oscuridad, dando la sensación de una escena muy teatral, donde los violentos juegos de luces favorecen la concentración de nuestra atención en aquellos aspectos que el autor quiere resaltar, sobre todo en pintura religiosa, acentúa el dramatismo y la piedad. Un buen ejemplo Martirio de San Pedro Caravaggio.